La expresión ipso facto significa literalmente «por el mismo hecho» y se usa para indicar que algo ocurre como consecuencia directa e inmediata de una acción o circunstancia. Sin embargo, en el uso cotidiano, a menudo se emplea erróneamente como sinónimo de «automáticamente», cuando en realidad su significado implica una relación de causa y efecto inmediata, pero no necesariamente mecánica.
Por ejemplo, si alguien dice «Si renuncias, ipso facto pierdes el puesto«, la frase es correcta porque la pérdida del puesto es consecuencia directa de la renuncia. Sin embargo, no sería preciso decir «Al encender el interruptor, la luz se enciende ipso facto» si simplemente queremos expresar que sucede de manera automática. Comprender esta distinción ayuda a mantener el uso correcto de la expresión en contextos adecuados.